Seudiel Walteros: El llanerazo
“El verdadero llanero no nace, se hace trabajando en los hatos, aprendiendo a cultivar y viviendo en la vega del río”.
Saudiel Walteros, es un campesino de 52 años, habitante tradicional de las tierras a orillas del Río Pauto, en el departamento del Casanare. Allí tiene una finca que heredó de su padre y que se ha convertido en su centro de operaciones. En ella, recibe visitantes de todas las edades y de diferentes nacionalidades, en donde les enseña sobre la cultura del llano, una región rica en recursos y que por años debido al conflicto que la azotaba, fue inaccesible incluso para los mismos colombianos.
En el 2004, vio las puertas de su región abrirse poco a poco, y con esto la oportunidad de ejercer su verdadera pasión: conservar y enseñar sobre la cultura y las costumbres llaneras. Luego de haber sido destacado como “El Gran Llanerazo”, en un reality de la televisión nacional que puso a prueba todas sus capacidades de supervivencia en el campo abierto, decidió dedicarse al turismo.
Dos años después, en 2006, recuperó una antigua caballeriza y una casa de estilo llanero con el objetivo de convertirlas en un museo. También se dedicó a rescatar y preservar restos arqueológicos de los cuatro pueblos indígenas que ancestralmente habitaron en esas tierras.
Durante los últimos 15 años, a trabajado sin cesar por fortalecer el turismo de su región.
¿Cómo el turismo cambió tu vida?
Para mí ha sido la experiencia más bonita. Yo soy la persona más contenta de la vida por trabajar en esto, por conocer tantas personas, aprender de ellas cuando vienen.
Me cambió la forma de ganar un salario. Anteriormente uno ganada por jornales. Es un cambio total, porque uno empieza a ganar un poquito más, la vida de uno empieza a cambiar.
Conectarnos con el turismo fué un cambio muy bonito que le paso a nuestra familia.
¿Por qué crees importante preservar el turismo que tú haces?
Hay gente que quiere montar a caballo y yo alquilo los caballos a los vecinos. Los días que hay grupos grandes de turistas, puedo pagarle más de un jornal a las personas que me colaboran. Eso es muy gratificante.
He tenido la experiencia de trabajar con niños. Le dicen a uno: “Yo esto no lo conocía, yo no sabía que esto era así”. Enseñarle la cultura del hombre llanero a los niños es bonito.
Otra cosa es que yo fui como el pionero en el municipio en integración con los demás actores actuales del turismo y los grandes hatos. Logré convencerlos que el turismo era bueno. Ellos hoy en día son las personas más convencidas y más animadas para seguir luchando.
¿Cómo te has visto afectado?
A mi me afectó todo, total. Desde hace más o menos 2 años hasta antes de la pandemia, estuvimos copados. No tenía tiempo ni de estar en mi casa. Hoy en día no podemos ofrecer el servicio, ni recibir gente. No hemos recibido ningún ingreso.
Bono de Esperanza para Saudiel
Si quieres darle esperanza a Seudiel y que tenga un alivio económico mientras el Casanare vuelve a abrir sus puertas, puedes comprar desde ya tu experiencia para pasar un día en Rancho Museo El Llanerazo. Seudiel te enseñará sobre su cultura y lo que implica ser un auténtico llanero. Si el nivel del río lo permite, verás un vaquero cruzándolo con su caballo. Visitarás el museo arqueológico y el cultivo de cacao. Podrás aprender a hacer chocolate. Incluye almuerzo típico.
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